Esta mañana, miando Facebook un poco por encima, he visto un cartel de ACRE (Asociación de Conservadores Restauradores de España) que me ha llamado la atención.
Hace cosa de un año más o menos, tuve varias reuniones con un grupo de conservadores-restauradores de Valencia.
En estas reuniones se hacía un acta de todos los temas tratados en estos encuentros y las posibles acciones a desarrollar, o medidas a tomar y proponer.
Me sorprendió mucho un tema que se trató (con mucha seriedad además) y que es algo que nunca te mencionan en la universidad. Desconozco si en otras instituciones relacionadas con este ámbito tampoco lo nombran. Pero es algo muy serio, que perjudica directamente el papel del conservador-restaurador. Estamos hablando del Intrusismo Laboral.
Sí, me explico...
Si buscamos estos términos, nos aparece la siguiente definición:
Intrusismo o intrusismo profesional es el ejercicio de actividades profesionales
por persona no autorizada para ello. Puede constituir delito.
Es el ejercicio fraudulento de una profesión sin la titulación necesaria.
Por lo que se dan dos condiciones:
1. Requerimiento de una titulación profesional oficial.
2. Entidad reguladora y controladora del ejercicio profesional.
Antiguamente eran los gremios, en la actualidad suele ser los colegios profesionales y en su defecto, las instancias judiciales correspondientes.
Y esta, lamentablemente, es una situación que se da continuamente en el sector de la CRBBCC.
Sin ir más lejos, uno de los últimos casos ocurrió hace no muchos años, en el 2005.
Y tuvo lugar en uno de los monumentos más famosos de Valencia. Ni más ni menos que en las Torres de Quart.
Para los que no hayan estado nunca en Valencia y no las conozcan, son éstas:
Baldomar, F. y Compte, P. (1441-1460). Torres de Quart [Portal fortificado].
Valencia, España.
Unas torres pertenecientes al gótico tardío valenciano militar (1441-1460), en muy buen estado de conservación, que deben su nombre a que estaban situadas en el camino que llevaba desde el centro de la ciudad, desde la Plaza de la Virgen (donde se ubica la Catedral de Valencia), hasta el pueblo de Quart de Poblet.
Unas torres marcadas para siempre por el impacto de las balas de los cañones, que estallaron por la Guerra de la Independencia de los franceses. También han sido testigo de la Guerra de Sucesión, de las rebeliones cantonales y de la Guerra Civil Española. Siendo declaradas en 1931 Monumento Nacional y catalogadas como Bien de interés cultural.
Y ahora viene la parte que pone los pelos de punta...
Hace algunos años, en 2006 concretamente, un equipo interdisciplinar compuesto por arquitectos, físicos, químicos, ingenieros y un militar participaron en la limpieza y consolidación de estas torres.
Y ahora viene la pregunta del millón: ¿Y el restaurador? ¿Dónde está?
El restaurador es aquella persona que posee los conocimientos, aptitudes, capacidades y titulación necesaria para llevar a cabo una tarea de consolidación y limpieza de un monumento.
¿Porqué el Ayuntamiento cuenta con varios trabajadores de diferentes ramas laborales pero no posee a un conservador-restaurador en su plantilla?
Y no sólo eso. Las tareas de limpieza se llevaron a cabo mediante unas obras de rehabilitación que quedaron bajo sospecha. Quedando en el centro de una presunta red de captación de dinero.
Tiempo más tarde, se tuvo acceso al expediente administrativo del proyecto de rehabilitación, que superó los 1,5 millones de euros y fue adjudicado a la empresa Cleop.
Cleop es una empresa constructora, y no está especializada en consolidaciones.
Por otro lado está el tema "de falsificación de las obras". Según las normas existentes en la CRBBCC, no pueden suprimirse ni añadirse elementos que modifiquen una obra.
Por poner un ejemplo muy fácil: Sabemos que la famosa escultura Venus de Milo tenía brazos, pero cuando fue encontrada semienterrada, ya no los tenía en su cuerpo, y además, estaban totalmente rotos. Así pues, no se sabe exactamente qué posición tenían los brazos. Por esta razón, si la escultura sufriera daños y tuviese que ser restaurada, no se le pueden añadir brazos, puesto que se encontró ya sin ellos. De otra forma, esta acción sería falsificar la obra.
Y en el caso de que se quisiera recrear cómo sería la Venus con brazos, debe hacerse de forma que se diferencie bien de la obra original y que, además, pueda ser reversible (la Reversibilidad es uno de los principios fundamentales de la conservación. Todo aquéllo intervenido tiene que poder ser eliminado en un futuro sin dañar la obra). Aquí está el ejemplo:
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No queda bien. Para nada. Pero son las normas de la CRBBCC, y hay que cumplirlas.
Lo que me lleva al siguiente hecho, encontrado en un periódico de ese año:
Los arquitectos directores de los trabajos, Javier Benlloch y Manuel Ramírez, catedráticos de la Universidad Politécnica de Valencia y responsables de la reciente intervención de limpieza de la Lonja de Valencia, explicaron que "las huellas de la historia no se van a eliminar" y que pedirán asesoramiento e información al coronel director del Museo Militar, Adán García, en relación con los 132 impactos de cañonazos y balas de calibre medio y alto detectados, producto de tres diferentes guerras: de Sucesión, de Independencia (sobre todo) y la revolución cantonal.
Redacción. (25 de mayo de 2005). La limpieza de las Torres de Quart respetará los cañonazos. El Periódico. Recuperado de https://elpais.com/diario/2005/05/25/cvalenciana/
Así que...¡claro que no se van a eliminar los cañonazos! ¡No puede eliminarlos!
Es la imprenta que dejó un hecho histórico muy importante de la ciudad y no puede eliminarse.
Es una decisión que no debe tomar un arquitecto o un militar. Es un principio fundamental del ámbito de la conservación y no puede ignorarse por completo. De esta forma, una decisión diferente implicará falsificar el patrimonio histórico y cultural.
Una vez más, ¿Dónde está aquí la figura del conservador-restaurador?
Hay conservadores especialistas en Derecho dentro de la CRBBCC. No se puede prescindir de ellos.
Y sin pasar por alto que estas torres presentan elementos de pintura mural medieval.
¿Sabe un militar cómo restaurar/conservar esto? ¿Y un físico? ¿Y un arquitecto?
Pues un conservador sí. Y precisamente es la única figura que faltó en este proyecto.
Da qué pensar, ¿verdad?
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